Desayuno buffet con tartas caseras excelente.

Encontrar un lugar para dejar el coche resultó ser una tarea frustrante, especialmente después de un día de exploración. Además, la habitación tenía problemas de insonorización, ya que se escuchaban claramente ruidos de otras habitaciones, lo que dificultaba el descanso. Aunque la ubicación es buena, el acceso a pie al pueblo no es del todo cómodo, ya que hay que transitar por una carretera.

Ambiente tranquilo y dulce casero.

Spoiler, no te vas a arrepentir

Con un encanto rústico, mis noches fueron agradables, aunque el aparcamiento es escaso y no hay opciones de cena en el hotel. Las habitaciones son amplias y limpias, y el desayuno ofrece lo básico pero correcto. La ubicación, a un paseo del centro, permite disfrutar del hermoso entorno. Volvería por su buena relación calidad-precio.

La habitación era enorme, limpia y con vistas increíbles al río. El personal fue encantador y la atmosfera tan tranquila, ¡perfecta para desconectar!

Eso sí, escuché más de lo que quería de mis vecinos, ¡parecía que hacían una fiesta silenciosa!

El Caserón De La Fuente es un verdadero hallazgo. Las habitaciones amplias y con una decoración rústica muy cuidada. Desayunar junto al sonido del río es simplemente perfecto. El ambiente de paz y la amabilidad del personal hacen que desees volver. Algunas dificultades con el aparcamiento, pero vale la pena.

Todo estaba muy limpio y las habitaciones son amplias. La cercanía al casco histórico de Albarracín fue genial para pasear con la familia. Mis hijos disfrutaron del sonido relajante del agua. Además, el desayuno con tartas caseras hizo nuestras mañanas aún más especiales.

Mi mujer dice que la insonorización de las habitaciones debería mejorar un poco, ya que se oían los ruidos de los vecinos. sería genial tener un menú ligero en la cafetería por la noche.

La habitación era amplia y super limpia, con una cama comodísima que me hizo sentir como en casa. La decoración rústica le da un toque especial y el sonido del agua del río que pasaba por debajo es relajante. Aunque se podía escuchar un poco a los vecinos, no fue muy molesto. En general, el ambiente era cálido y acogedor.

encuentra calma en el río y tartas caseras, un abrazo familiar en cada rincón

El Caserón de la Fuente fue una maravilla en nuestra estancia. La habitación fue amplia y acogedora, con ese toque rústico que hace sentir como en casa. Ver el río desde la habitación fue simplemente mágico. Además, el personal fue increíblemente amable y siempre dispuesto a ayudar. Esos desayunos con tartas caseras. ¡no puedo olvidarlos! Todo perfecto para desconectar.

Hotel ideal para un viaje con amigos. El desayuno fue excelente y las chicas muy amables. A solo 10 minutos a pie del centro, lo que lo hace muy accesible. Visitamos la hermosa plaza mayor y las impresionantes murallas. Recomendado para quienes buscan tranquilidad y un ambiente acogedor.

El aparcamiento fue un poco complicado y el acceso a pie no es del todo cómodo. Una sugerencia sería tener una opción de menú ligero en la cafetería por la noche para disfrutar después de un día de exploración.

El hotel destaca por su encanto rústico y la amabilidad del personal, que siempre estuvo dispuesto a ayudar. Las habitaciones son cómodas y bien decoradas, aunque la insonorización no es la mejor y se pueden escuchar ruidos de otras habitaciones. La ubicación es conveniente, a poca distancia del pueblo, aunque el aparcamiento puede ser un desafío. El desayuno ofrecía productos frescos y locales, muy satisfactorio para comenzar el día.

el caserón es una pasada, la habitación es super amplia y chula, con decoración rústica. el ruido del agua del río le da un toque relax 100%. el desayuno buffet está super bueno, con tartas caseras que flipas. el ambiente y la atención del personal son top, siempre dispuestos a ayudarte. la ubicación también está bien, a solo 10 min del centro, ideal para pasear.

aunque todo está genial, el aparcamiento es un lío y la insonorización de las habitaciones no es la mejor.

Las habitaciones son amplias y muy limpias, un lugar tranquilo para descansar. El aparcamiento es escaso y no siempre fácil de encontrar. Pero el desayuno buffet con tartas caseras está increíble.

El Caserón De La Fuente es más encantador que un gato en una caja de zapatos. Las terrazas con vista al río le dan un toque especial. es como tener una película de naturaleza en tu ventana. Y la conexión wifi es tan rápida que podría funcionar para un maratón de series, ideal para planear la siguiente aventura mientras se disfruta de un buen café en la cafetería.

Insonorización mejorable

Una estada ben bonica, habitació amb encant, decoració rústica i llit molt còmode. L'esmorzar amb pastissos casolans per llepar-se els dits. Amb el so de l'aigua del riu, relax total!